Una de las colecciones más icónicas de David Yurman es Cable. Este set de joyas comenzó como una pulsera que retorció a mano desde 50 pies de alambre.
El fundador de la firma, cuyo trabajo previo fue el de escultor, estaba fascinado por el cable en la joyería griega, romana y celta, ya que reconocía que esta forma espiral se encontraba en la naturaleza y a lo largo de la historia.
Esta colección ha evolucionado durante los últimos 40 años, colocando la hélice retorcida en una infinidad de diseños. Lo podemos encontrar con y sin piedras preciosas, en metales preciosos y materiales inesperados. Ha sido reimaginado en formas talladas, representa el pasado, presente y futuro del diseño de la firma.
Sus piezas están elaboradas en oro blanco y oro rosa, combinados con distintos materiales como diamantes pavé en distintos pesos. También lo encontramos combinados con distintas piedras preciosas como amatista, onyx negro, topacio azul y organita; la presencia del oro amarillo termina por convertirlo en un brazalete inolvidable.
Hoy en día, el motivo trenzado de Cable aparece en todas las colecciones de la fima, desde anillos hasta colgantes y eslabones de cadenas escultóricos, y a menudo en combinaciones sorprendentes de metales mezclados pulidos, con detalles de gemas brillantes que unifican nuestros diseños.
Patricia Olivares Taylhardat Directora Editora GEOT On Time y Velvet Magazine