Dolce & Gabbana es sinónimo de sofisticación y su colección DNA es la representación perfecta de esta premisa. Con el atractivo atemporal del blanco y el negro, están elaboradas en oro y piedras preciosas.
El primer accesorio de mi selección particular es el colgante Family. Se trata de una cadena con una forma sutil, que está adornada con dos colgantes: una cruz latina, realizada con zafiros negros y una rosa hecha de jade negro. Además, tiene una rosa de jade negro.
Para combinarlos, nada mejor que los pendientes de cruz de esta colección. Elaborados en oro y zafiros negros, la cruz está decorada con flores hechas de zafiros negros y una perla en forma de gota. Como acabado, se presentan cuatro medallas de la virgen y con querubines.
Pero, ¿qué accesorio le falta a esta selección? Por supuesto, una pulsera; joya que, evidentemente, la maison presenta en la más maravillosa forma. Por ejemplo, los anillos Family están compuestos por zafiros negros colocados alrededor de toda la circunferencia. Están decorados con tirabuzones barrocos inspirados en la era borbónica, que destacan la elegancia de la composición y la luminosidad de las gemas.
Si de combinaciones hablamos, esta línea del emporio nos regala una inolvidable. El collar Family combina oro amarillo y blanco y está compuesta por varias cadenas en una sola.
La principal está elaborada en oro amarillo; se desdobla en tres cadenas diferentes: una realizada con quince esferas de jade negro enlazadas, una cadena rolo en oro blanco y un hilo compuesto de treinta perlas de agua dulce.
Este último elemento se ha decorado con cuatro colgantes en forma de cruz, realizados con zafiros negros y otros tres colgantes con perlas en forma de gota.
Patricia Olivares Taylhardat Directora Editora GEOT On Time y Velvet Magazine