Louis Vuitton me sorprende una vez más. Esta vez gracias al emblema de la maison. La flor del monograma reaparece en la colección Star Blossom con sus característicos pétalos puntiagudos, elementos que se exhiben en seis exquisitivas creaciones de joyería.
Colgantes, pendientes, una pulsera y un anillo son tantos talismanes modernos que se pueden usar solos, combinados o en capas, según el estado de ánimo de cada quien. La construcción perfectamente dominada del diseño Monogram Flower, a mi modo de ver, resuena en armonía con las piedras y metales preciosos. Un clavo de oro blanco, que evoca la herencia de fabricación de baúles de la Maison, se encuentra en el corazón de cada motivo.
Lo que más me gusta, es que la colección Star Blossom ahora incluye un brazalete ornamental vibrante y moderno hecho de diamantes y oro rosa. Con esta nueva creación, que se puede llevar sola o en pareja, Monogram Flower abraza sensualmente el contorno de la oreja.
Transmitiendo elegancia y vitalidad, las últimas piezas de Star Blossom demuestran la inventiva y la experiencia en joyería de Louis Vuitton, una prueba más del perdurable poder evocador de la flor del monograma, más de un siglo después de su creación.
Patricia Olivares Taylhardat
Directora Editora GEOT
On Time y Velvet Magazine
