La historia del Cartier Tank se remonta a los primeros años del siglo XX. Diseñado por el nieto del fundador de la firma francesa, Louis Cartier se inspiró en la banda de rodadura del tanque Renault FT-17, un vehículo de guerra francés que se usó en la Primera Guerra Mundial.
Un aspecto que lo diferenció de los otros relojes son sus líneas; un poco más curvilíneas que el resto de los modelos de la maison. En sus comienzos, este reloj solo se llamaba “Tank”. Luego pasó a llamarse Tank Normale, que fue la inspiración de muchas creaciones futuras, como el Tank Francaise, lanzado en 1996, pero con el que tiene bastantes similitudes ¿Un dato curioso? el Tank Normale fue el reloj preferido de la actriz Elizabeth Taylor.
El Tank Américaine, por su parte, se caracteriza por tener una caja alargada y una curva más pronunciada que la del modelo original. Este diseño actualiza la geometría de las líneas, conservando la forma rectangular y a la vez alternando entre los bordes redondeados y los ángulos. Este reloj de lujo atemporal sin duda le dejará sin aliento.
Pero, en un diseño más renovado, se nos presenta en un tamaño mini. Con un movimiento de cuarzo y una caja elaborada en oro amarillo, Su esfera es plateada satinada con efectos de rayos de sol.
Este reloj es una pieza de diseño, que se caracteriza por la pureza de sus líneas con las que se ha convertido en todo un ícono de la casa joyera francesa.
Patricia Olivares Taylhardat Directora Editora GEOT On Time y Velvet Magazine